Las irregularidades afectan a las nuevas generaciones de los Toyota Yaris y Agya, además del Perodua Axia (un Agya remarcado) y un cuarto modelo que aún está en etapa de desarrollo. Estos vehículos son fabricados por la subsidiaria Daihatsu, pero llevan el emblema de Toyota en varios mercados.
Nuevos envíos suspendidos
Básicamente, Toyota admitió que en Daihatsu modificaron las puertas de los modelos con el objetivo de obtener mejores resultados en las pruebas de choque. Luego de este descubrimiento los nuevos envíos han sido suspendidos.
Según informa Reuters, las modificaciones se realizaron para evitar que una pieza con bordes afilados se rompa en pedazos, lo que podría lesionar a los ocupantes durante el despliegue de una bolsa de aire lateral. El problema es que las modificaciones no fueron instaladas en las unidades finales.
Todo salió a la luz tras una denuncia interna que incluye a las plantas de Malasia, Tailandia e Indonesia. Hay 88,123 unidades afectadas, siendo el nuevo Yaris el más impactado con 76,289 unidades al mes de marzo 2023.
La marca confirma que los modelos fueron exportados a los mercados de Tailandia, Medio Oriente, México, etc. Teniendo en cuenta que Panamá recibe el Toyota Yaris desde Tailandia, es probable que nuestro mercado este dentro de esos llamados “etc.”.
Sobre el Toyota Agya, hay que decir que se trata de la nueva generación del compacto, un producto que todavía no se presenta en nuestra región.
Ahora bien, Toyota todavía no anuncia un llamado a revisión para las unidades que ya fueron entregadas. De momento solo se confirma que se volverán a probar las unidades con las piezas adecuadas para obtener luz verde de las autoridades y reanudar los envíos.
Desde Toyota también dicen que se investigará el alcance total de las malas acciones de Daihatsu y las causas fundamentales. Además, se estará trabajando en evitar que vuelvan a ocurrir problemas similares a futuro.
Mayores detalles deben salir en los próximos meses.
Es importante recordar que en Panamá no existen regulaciones de seguridad vehicular ni tampoco para los llamados a revisión o recalls, por lo que dependemos en un 100 % de la intención del fabricante de solucionar el problema por sí solo.
Fuente: Toyota, Daihatsu, Reuters