El Chevrolet Tracker regional, fabricado en Argentina y Brasil, incorpora mejoras para seguir vigente en el exigente segmento B, mientras Panamá espera su llegada próximamente.

 

  • Debutó primero en Brasil, donde se mantienen los motores flex 1.0 L turbo y 1.2 L turbo de tres cilindros; en Panamá, la opción 1.2 L debería conservarse estándar.
  • La actualización de diseño y equipamiento contempla la variante de apariencia deportiva “RS”, que Chevrolet aún no presenta en nuestro mercado.

 

 

El Chevrolet Tracker hizo su debut regional en Brasil en 2019 como modelo 2020, marcando el inicio de su actual generación. Aunque también se fabrica en Argentina, esta nueva actualización —la más significativa desde aquel lanzamiento— parece seguir el patrón habitual: Panamá lo recibirá desde Brasil, como ha ocurrido en años anteriores.

 

 

Nuevo diseño exterior

El Chevrolet Tracker 2026 muestra una evolución marcada en su parte delantera, con faros divididos en dos secciones y una parrilla más prominente, que refuerzan su identidad visual. Su diseño se inspira en otros SUVs de la marca como el Equinox y el Blazer, logrando una estética más unificada dentro del portafolio de Chevrolet. En la zona posterior, los ajustes son más sutiles, limitándose a un rediseño interno en los elementos de las luces traseras. Esta actualización también lo acerca visualmente a su variante pickup derivada, la Chevrolet Montana.

 

 

Como suele suceder en este tipo de actualizaciones, también se han incorporado nuevos diseños para los rines. A modo de referencia, el Chevrolet Tracker mide 4,270 mm de largo, 1,791 mm de ancho y tiene una distancia entre ejes de 2,570 mm.

 

Cambios profundos en la cabina

Dentro del habitáculo, el upgrade más notable es la incorporación de un nuevo panel de instrumentos, que puede incluir una pantalla multimedia de mayor tamaño, integrada a un panel digital completo con interfaz actualizada. Este formato, similar al ya utilizado en el Spin, la pickup S10Colorado, aporta un aire de modernidad. Aunque el volante mantiene su diseño, ahora incorpora en el centro el logotipo negro de Chevrolet, alineándose con la nueva narrativa visual de la marca.

 

 

Sin novedades bajo el capó

En el apartado mecánico, se especuló sobre la llegada de una variante Mild Hybrid para el mercado brasileño, aunque la marca ha confirmado que no ocurrirá antes de 2026. En consecuencia, se mantienen los conocidos motores 1.0 L y 1.2 L turbo de tres cilindros, ahora con ajustes en sus prestaciones para responder a las demandas del mercado brasileño. En mercados fuera de Brasil, como Panamá, la configuración estándar seguirá siendo el motor 1.2 L turbo, con 130 hp y 140 lb-pie de torque, acoplado exclusivamente a una transmisión automática de seis velocidades y tracción delantera.

 

Para cerrar, en materia de seguridad, el Tracker ha estado disponible desde su lanzamiento con seis bolsas de aire y control de estabilidad (ESP), además de un paquete de asistencias a la conducción (ADAS); equipamiento que debería mantenerse sin cambios. Esta generación obtuvo cinco estrellas en las pruebas de seguridad de Latin NCAP, un galardón que debería revalidar en futuras evaluaciones.

 

Disponibilidad

El renovado Chevrolet Tracker ya se produce en Argentina y Brasil, y se perfila como una de las novedades que la marca introducirá en Panamá próximamente. Como se mencionó previamente, el Tracker panameño proviene de la planta brasileña, y los detalles específicos para nuestro mercado serán publicados oportunamente.

 

Galería: El nuevo Chevrolet Tracker

 

Fuente: Chevrolet.